Hablamos con la sexóloga Ana Lombardía en nuestro último consultorio de salud en TikTok.
"Según como te veas tu a ti misma, cómo percibas tu atractivo físico y en general como te sientas en ese sentido va a variar la forma en la que te enfrentes a las relaciones sexuales". Con estas palabras la sexóloga y psicóloga Ana Lombardía señala la importancia que tiene nuestra autoestima en el sexo.
Y es que, al contrario de lo que se suele pensar, el sexo no siempre surge de forma fácil y sencilla y los orgasmos no iluminan a todas las mujeres por igual. Así, de la misma forma que la ansiedad, el estrés o la depresión pueden inhibir por completo nuestra libido, una mala relación con nosotras mismas también.
Sin amor propio no hay placer sexual
Tal y como explicaba la misma sexóloga hace varias semanas en otro artículo sobre los orgasmos mecánicos, parte del secreto de poder disfrutar de unas relaciones sexuales placenteras, saludables y satisfactorias recae en nuestra capacidad de descontrol.
Esta misma idea está estrechamente relacionada igualmente con nuestra autopercepción. Si a la hora de mantener relaciones sexuales estamos más pendientes de nuestra apariencia física que de liberarnos y perder el control para sentir el placer, estaremos poniendo el foco en la parte equivocada.
"Si no te sientes atractiva y durante la práctica sexual estás constantemente enviándote mensajes negativos contra tu propio cuerpo será menos probable que tu cabeza pueda focalizar su atención en alcanzar el placer", señala Ana Lombardía.
De hecho, esta misma realidad ha sido ratificada por varias investigaciones que observaron cómo influye la autoestima a la hora de disfrutar del sexo. Por ejemplo, este estudio dedicado a observar la relación que existe entre la autoestima de mujeres que habían sido sometidas a una mastectomía demostró que mientras el grupo de control (compuesto por mujeres que no habían perdido un pecho) disfrutaba de un sexo placentero a los 60 años, aquellas que habían superado el cáncer de mama y que tenían la misma edad reconocían tener una autoestima mucho más baja y referían unas relaciones sexuales más deficientes.
"Si tu te encuentras a gusto, conforme con tu propio cuerpo y te ves atractiva vas a disfrutar mucho más del sexo porque esto hará que puedas estar relajada y desinhibirte en la cama centrándote exclusivamente en el placer", añade la sexóloga, quien apunta la necesidad de trabajar la confianza y una relación sana con nosotras mismas antes de atajar problemas sexuales más concretos.